...y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra... |
El tema con el que iniciamos este blog era el de la necesidad de ser persistentes en la presentación del evangelio a nuestros alumnos y a nuestros hijos y a todo aquel con quien tengamos oportunidad. En este momento nos ocupamos de revisar algunas cosas expuestas por el pastor John Piper en su libro ¡Más vivo que nunca! Qué sucede cuando nacemos de nuevo.
Al comenzar a contestar la pregunta ¿Qué sucede en el nuevo nacimiento? dijimos en primer lugar que en el nuevo nacimiento no adquirimos una nueva religión, sino que obtenemos una nueva vida. En segundo lugar dijimos que no es solo afirmar lo sobrenatural en Jesús, sino experimentar lo sobrenatural en uno mismo. Sigamos.
En tercer lugar, no se trata de una mejora de la vieja naturaleza, sino de la creación de una nueva naturaleza humana, una naturaleza que es realmente usted, perdonado y limpio; y una naturaleza que es realmente nueva, formada en usted por el Espíritu de Dios que mora en su interior.
En Juan 3:5, Jesús dice a Nicodemo: "De cierto, de cierto te digo, que el que no nazca de agua y Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios." ¿Qué quiere decir Jesús con los dos términos, "de agua y del Espíritu"?
Ezequiel 36:24-28 "Por cuanto yo os tomaré de entre las naciones, y os recogeré de todos los países, y os traeré a vuestra propia tierra. Y rociaré agua limpia sobre vosotros y seréis limpios de todas vuestras inmundicias, y os limpiaré de todos vuestros ídolos. Os daré un corazón nuevo, y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros, y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos y los pongáis por obra. Habitaréis en la tierra que di a vuestros padres, y vosotros me seréis por pueblo, y Yo seré a vosotros por Dios."Creo que este es el pasaje en el que se basan las palabras de Jesús. ¿A quienes dice Dios: "y vosotros me seréis por pueblo, y Yo seré a vosotros por Dios."? A los mismos a quienes dice: "Y rociaré agua limpia sobre vosotros y seréis limpios de todas vuestras inmundicias," y "Os daré un corazón nuevo, y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros...". En otras palabras, los que van a entrar en el reino de Dios son aquellos que tienen algo nuevo que implica una limpieza de lo viejo y una creación de lo nuevo.
Por tanto concluyo que "agua y Espíritu" en Ezequiel 36 se refieren a dos aspectos de nuestra novedad cuando nacemos de nuevo. Y la razón por la que ambos son importantes es esta: cuando decimos que se nos da un nuevo espíritu (o un nuevo corazón), no queremos decir que dejamos de ser los seres humanos -el ser moralmente responsable- que siempre hemos sido.Hay una continuidad. Por eso tiene que haber limpieza. Si el viejo ser humano, fuera completamente borrado, todo el concepto de perdón y limpieza fuera irrelevante... Mi culpa debe ser lavada. Limpiar con agua es una figura de eso...La persona que continua existiendo, debe ser perdonada, y la culpa lavada.
Sin embargo, perdón y limpieza no son suficientes. Necesito ser nuevo. Necesito ser transformado. Necesito vida. Necesito una nueva forma de ser, pensar y valorar. Por eso Ezequiel habla de un nuevo corazón y un nuevo espíritu.
En el nuevo nacimiento Dios quita el corazón de piedra y pone un corazón de carne. La palabra carne no significa puramente humano...significa blando, vivo, sensible y con capacidad de sentir , en vez de ser una piedra sin vida. En el nuevo nacimiento, nuestro corazón muerto y de piedra, con Cristo, se reemplaza con un corazón que percibe el valor de Jesús.
Queridos maestros que me acompañan, creo que lo maravilloso de esto que sucede en el nuevo nacimiento es tan asombroso que nuestra mente pequeña no puede atraparlo con total claridad. Deseo que el Señor nos mantenga asombrados de esta obra tan singular que él ha hecho en nosotros.
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