miércoles, 24 de febrero de 2016

Ejemplo, tras ejemplo

   Otros ejemplos de una verdadera conversión aparecen a lo largo de la Palabra de Dios y haríamos bien en sumergirnos en ellos, porque no solo debemos predicar arrepentimiento de pecados como hizo Jesucristo, sino que nosotros mismos debemos vivir en arrepentimiento y fe.
  Hoy revisaremos dos de estos ejemplos.  Comenzaremos con Zaqueo.  Este es uno de los personajes más famosos del Nuevo Testamento pero a mi modo de ver por la razón equivocada. Este personaje es famoso porque era un hombre de baja estatura, quizá la manera correcta de decirlo es afirmando que padecía de enanismo pero la Biblia dice que era "bajo de estatura".  Y la verdad es que se oye mejor así.
   Bueno, Zaqueo era un publicano.  Su indice de popularidad estaba por el subsuelo, porque siendo judío, era un funcionario que trabajaba para el imperio romano cobrando impuestos a los judíos.  Pero aun mas, Zaqueo era del grupo de los mas despreciados porque no contento con ser un "traidor", así los consideraba el pueblo, los publicanos siempre cobraban de mas y se quedaban con la diferencia.  Así que era corruptos, ladrones, estafadores y traidores.  Y aunque Zaqueo no era responsable de su baja estatura, ya tu y yo sabemos que cualquier defecto físico hace que la persona que lo padece sufra por causa del desprecio gratuito de la gente.
  Zaqueo era jefe de publicanos y rico.  Así que sus "defectos" no lo habían detenido y había surgido dentro de su "profesión": Publicano.  Seguramente había escuchado acerca de Jesús y ahora este mismo Jesús está entrando en Jericó y esto había causado que se reuniera una multitud la cual le impedía a Zaqueo, ver a Jesús al pasar.
   Inteligentemente, Zaqueo sube a un árbol para poder ver a Jesús y "casualmente" Jesús al pasar se invita a sí mismo a posar en casa de Zaqueo. (No puedo perder esta oportunidad de señalar este hecho, Zaqueo no lo invitó, se invitó Jesús mismo y eso me recuerda que nosotros no podemos decidir que Jesús venga a vivir a nuestro corazón. Bueno eso lo hablaremos mas adelante). Zaqueo lo recibe con gozo, y lo próximo que el Espíritu Santo inspiró a Lucas a decir es que Zaqueo se puso en pie y le dijo al Señor: "He aquí Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres, y si algo he defraudado a alguno, lo restituyo cuadruplicado."
   Aquí hacemos un gran paréntesis para entender bien este asunto.  ¿Cómo es que Zaqueo habla de algo como si lo estuviera haciendo, cuando en realidad no lo estaba haciendo? En ese momento él no estaba dando la mitad de sus bienes a los pobres, ni tampoco estaba devolviendo lo robado multiplicado por cuatro.  La razón es que en el idioma griego, cuando algo que aun no había sucedido era seguro, seguro, seguro que sería hecho, no se expresaba en el tiempo futuro, sino en tiempo pasado o en presente, como en este caso.  Esta forma de escribir indica la firmeza de la resolución.  Quizá te gustaría leer con esta información en mente, Efesios 1 y te darás cuenta que allí se afirma que estamos sentados con Cristo en los lugares celestiales.
   Dicho esto, podemos entonces entender porqué Jesús dice al oír a Zaqueo: "...Hoy ha venido salvación a esta casa..."  ¿Querría decir Jesús que por estar Zaqueo dando dinero a los pobres y mejorando su profesión el sería salvo?
¡No, claro que no!  El cambio de mente y el cambio de dirección que se estaba manifestando era una prueba de que había habido una obra de transformación sobrenatural en la vida de Zaqueo. Había arrepentimiento.
   Y ¿has leído la historia completa de Saulo?  Es impresionante.  Por favor, detente a leerlo.  Comienza leyendo el capítulo 7 donde se narra la declaración de Esteban antes de ser apedreado.  Es vital comenzar a ver este caso de Saulo desde allí, porque él estaba oyendo a Esteban y presenciando su apedreamiento.  Las ropas de Esteban fueron puestas a sus pies y el capítulo 8 comienza diciendo que Saulo consintió en su asesinato.  Allí podemos ver claramente la condición de este hombre joven.  Te voy a delinear esta historia:
   .  Saulo asolaba la iglesia.
   .  Entraba en las casas y arrastraba a hombres y mujeres y los llevaba a la cárcel.
   .  Respiraba amenazas y muerte contra los discípulos del Señor (y no es de los apóstoles de quien se esta hablando aquí).
   .  Consiguió cartas de permiso de las autoridades judías para que cuando consiguiera a hombres y mujeres que eran seguidores de Jesucristo, creyentes, los pudiera traer amarrados hasta Jerusalem.
   .  Yendo hacia Damasco cayó del caballo debido a una luz del cielo que resplandeció alrededor de él.
   Según estudiosos, Saulo como buen judío religioso, reconocía que esta luz resplandeciente que sobrepasaba la luz del sol, era la gloria de Dios manifestándose.  Si eso es así, entonces esa podría ser la razón por la cual Saulo dice: ¿Quién eres, Señor?
  .  No voy a contarte nada más.  Te invito a leer esta historia de arrepentimiento verdadero y fe.  Pero sí te voy a dejar estos versículos para que compares la obra que hace el arrepentimiento que viene de Dios.
Hechos 26:9  "Yo, ciertamente, pensaba en mi interior que era mi deber hacer muchas maldades contra el nombre de Jesús de Nazaret; lo cual, en efecto, hice..."
Filipenses 1:21  "Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia."
Filipenses 3:8  "Y ciertamente aun considero todas las cosas como pérdida por la superioridad del conocimiento de Jesucristo, mi Señor, por el cual perdí todas las cosas y las tengo por estiércol, para ganar a Cristo..." 
   Esto es arrepentimiento, no pesar o tristeza.




   







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